martes, 28 de diciembre de 2010

Sobran las palabras

Ya no escribo
porque no llega la brisa a mi ventana
porque el almendro perdió su flor
la cigarra ya no canta
y el sol se ocultó.

Ya no escribo
porque tú callas

Y cuando el rimmel baja por mi cara
sobran mis palabras
y hasta sobro yo.